lunes, 13 de mayo de 2013

12 DE MAYO: EN TIERRAS DEL LÚPULO

Tenía una cuenta pendiente con cierto río que me había dado julepe en las últimas visitas Tanto es así, que no lo pescaba desde hacía, al menos, tres años. Aún con esos precedentes, enfilé hacia las tierras donde las plantaciones de lúpulo (materia prima esencial en la elaboración de la cerveza) invaden el paisaje y justo antes de su cosecha, ya en plena temporada estival, regalan unas estampas únicas.

El día no empezaba muy bien, ya que según reza el refranero popular, la mañana estaba para aplicar lo de "Niebla en la montaña, pescador en la cabaña". Aunque tampoco era excesiva, así que no me desanimó.
Tras vestirme de astronauta, me puse a pescar un tramo con muy buena pinta, aunque el caudal venía cañero y era muy complicado moverse con soltura. Incontables lances después, y sin tener ni una triste picada, metí la caña en el coche y bajé unos 3km para pescar un tramo con el caudal en su punto justo de cocción.

Poco a poco, conseguí levantar algunas truchas después de hilar muy fino, porque las muy... estaban bien pegaditas al fondo. Este año, me da que van a tardar un poco más en ponerse como locas. Como en jornadas anteriores, la ausencia de cebadas fue la nota predominante. Por suerte, si no comen arriba, comen abajo, y yo tengo la sana costumbre de llevar un buen surtido de golosinas que me permitan disfrutar con la reina del río.

Como anécdota, cuando me estaba cambiando para marcharme a casa, llegó un pescador que tenía su coche al lado del mío. Le pregunté qué tal se le había dado y me sorprendió la respuesta: "Es que acabo de llegar" Digo sorpresa porque estaba recogiendo los bártulos para irse ¿¿?? Luego vino la aclaración: se había dejado la licencia en casa. Me decía que sin licencia no iba a estar tranquilo. Bien por él; las cosas bien hechas bien parecen. Muchos otros en su lugar, se habrían arriesgado a una sanción. El pobre hombre tenía un cabreo importante, pero...

2 comentarios:

  1. Este año parece que no quieren despegarse del fondo. Tendremos que esperar para pescarlas en superficie.Pero bueno con pasar el dia en el rio y tener alguna picada ya se puede dar uno por contento. Un saludo carlos!!

    ResponderEliminar
  2. Así es, Jesús. Y suerte si están en el fondo, porque como se metan debajo de las piedras, olvídate, y esta situación ya me la he encontrado en algunas jornadas. Además hay que sumar que este año especialmente, los cormoranes les han dado para el pelo. Lo bueno es que cuando asomen, lo vamos a pasar pipa.

    Saludos!

    ResponderEliminar